Ir a la gasolinera

Si, qué pasa? Ir a la gasolinera. Me da mucha pereza siempre ir a repostar... Primero por el hecho de tener que parar en mi trayecto, y más si voy con prisa.

Pero especialmente me toca la moral cuando llego y me toca un surtidor de esos que no tienen palanquita para que se aguante sola la pistola. Y más si tengo que llenar el depósito. El caso es que no recuerdo cuando fue la última vez que me tocó uno de esos...

Además, esas pistolas van duras! Al menos para mi enclenque manita, y aguantar ahí esperando a que acabe cansa.

Y no hablemos ya del último euro de gasoil, ese que parece que nunca va a acabar de escupir el surtidor, ...,78€, ..., 82€....

Y si a todo esto le sumamos el atraco a mano armada que supone echar el preciado oro negro a nuestro cuatro ruedas, pues convierten el acto de poner gasolina en una tocada de co****es.... ¬¬.....